Por José Antonio Ramos Mesonero / 26 de Septiembre de 2024
LLa anoxia en el parto, o lo que es lo mismo, la falta de oxígeno al nacer, es una de las complicaciones más habituales durante el alumbramiento y sus consecuencias van desde las lesiones permanentes hasta la muerte.
¿Qué es la anoxia en el parto?
Durante el embarazo y el parto, a través de la comunicación de los vasos sanguíneos el feto recibe el aporte necesario de sangre, nutrientes y oxígeno.
El aporte de oxígeno suficiente al feto es absolutamente necesario para que sus funciones vitales sean las correctas.
Cuando este aporte de oxígeno es menor o se interrumpe a lo largo de un tiempo, las células comienzan a morir, y, en última instancia, esto acaba afectando a su corazón y cerebro de forma irreversible.
¿Qué consecuencias tiene para el bebé?
La falta de aporte de oxígeno acaba afectando a todas las funciones vitales del organismo, desde el sistema respiratorio, hasta el cardiovascular o cerebral.
Esto producirá una serie de daños, cuya gravedad y alcance dependerán del tiempo que haya estado sin el aporte de oxígeno suficiente y la cantidad de oxígeno que le ha faltado.
Cuando esta afectación ha sido leve, las secuelas pueden ser totalmente reversibles, pero, si la falta de oxígeno se ha prolongado durante unos minutos, el resultado puede ser fatal, llegando incluso a producir la muerte o daños irreversibles.
La falta de oxígeno al nacer afecta sobre todo al cerebro, ya que este se encuentra aún en desarrollo en ese momento. La falta de aporte de oxígeno al cerebro durante un tiempo prolongado producirá daños a nivel neurológico, que pueden traducirse en parálisis cerebral.
Una de las lesiones más habituales derivadas de la falta de aporte de oxígeno y sangre es la encefalopatía hipóxico-isquémica. Los síntomas más habituales son:
- Dificultades respiratorias
- Problemas de alimentación
- Afectación del tono muscular
- Convulsiones
- Reflejos reprimidos
¿Por qué se produce la anoxia durante el parto?
El déficit de oxígeno puede producirse a lo largo del embarazo, o durante el propio parto.
Las causas de la falta de aporte de oxígeno durante el parto pueden ser de distintos orígenes.
Los problemas en la placenta, como pueden ser un desprendimiento prematuro o una insuficiencia de esta.
Hipotensión materna, o, lo que es lo mismo, una tensión demasiado baja.
Anomalías en la contracción uterina
Partos muy largos y complicados que llegan a producir sufrimiento fetal
Cordón umbilical con un nudo verdadero o el llamado nucal (enrollado en el cuello del feto)
Cabe resaltar la importancia primordial de que, durante todo el proceso del embarazo, y finalmente durante el parto, el seguimiento que se haga por parte del equipo médico debe ser el necesario para detectar cualquier tipo de problema que sea previsible y establecer los protocolos de actuación necesarios.
Durante el parto, la atención sobre las constantes de la madre y el feto, son fundamentales, así como una buena actuación médica durante el procedimiento.
Negligencias médicas que derivan de hipoxia en el parto
La monitorización del feto por parte del personal médico es fundamental para detectar si se está produciendo un sufrimiento fetal y actuar en consecuencia. En estos casos lo habitual es practicar una cesárea de urgencia.
En caso de que el personal médico no actúe con la debida diligencia, las lesiones cerebrales que pueden producirse pueden ser fatales para el bebé, llegándole a poder producir la muerte o lesiones irreversibles.
¿Cómo actuar cuando se ha producido hipoxia durante el parto?
Si, desafortunadamente ha habido problemas durante el parto, los progenitores deben recabar toda la información posible, empezando por un informe médico detallado en el que se especifiquen todas las actuaciones que se han llevado a cabo de forma previa al parto, durante este y en horas posteriores.
También es importante saber el alcance de las lesiones que se han producido para valorar si existirán secuelas, y en este caso si serán reversibles o de carácter crónico.
Con toda la información, y si se sospecha que podemos estar ante un caso de negligencia médica en el parto, debemos contactar con un abogado especializado en negligencias médicas. Tanto él, como el equipo de expertos en cuestiones médicas con el que cuenta, podrán valorar de forma más exhaustiva la información y determinar si podemos encontrarnos ante un caso de negligencia y en cuyo caso, iniciar un proceso de reclamación.