
LLas infecciones por bacteria en hospital, itambién conocidas como infecciones nosocomiales o intrahospitalarias, son una mala praxis que puede denunciar. Estas infecciones que se adquieren durante las estancias hospitalaria, tanto en hospitales privados, como públicos, son evitables y una negligencia que si sospecha que ha sufrido, no dude en reclamar.
La OMS considera como infecciones hospitalarias o intrahospitalarias todas aquellas que son adquiridas durante la estancia en el hospital y que no se habían dado con anterioridad. No se consideraría infección nosocomial si la incubación de la afección se diese antes del ingreso.
Tabla de Contenido
- 1- Cuando se produce una negligencia médica por infección hospitalaria
- 2- Epidemiología y factores de riesgo que pueden haber contribuido a la producción de una infección nosocomial por negligencia médica
- 3- Dónde o cuándo se producen las infecciones hospitalarias más frecuentes
- 4- Ejemplos de infecciones por bacterías en hospitales
- 5- Implicaciones jurídicas: demanda por infección intrahospitalaria
- 6- Cómo denunciar una infección hospitalaria
- 7- Indemnizaciones infecciones intrahospitalarias
- 8- Contacta con nuestro despacho de abogados
Cuando se produce una negligencia médica por infección hospitalaria
Las infecciones hospitalarias, también conocidas como infecciones nosocomiales y actualmente como IRAS (infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria), son aquellas adquiridas durante la estancia en un hospital o centro de atención sanitaria. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), estas infecciones no deben haberse manifestado ni estar en periodo de incubación al momento del ingreso del paciente.
Factores comunes que facilitan estas infecciones:
- Prácticas de higiene deficientes: Como el lavado inadecuado de manos o la falta de esterilización de equipos médicos.
- Ambiente hospitalario: Condiciones de hacinamiento, flujo de pacientes vulnerables y desinfección insuficiente.
- Uso de dispositivos invasivos: Catéteres urinarios, ventiladores mecánicos o catéteres intravasculares, que crean vías de acceso para microorganismos.
- Falta de medidas de control: Como la ausencia de un seguimiento adecuado de los brotes de infecciones dentro del hospital.
¿Cuándo se considera negligencia?
Se puede hablar de negligencia médica cuando:
- No se han cumplido los protocolos nacionales o internacionales de prevención de infecciones.
- El personal sanitario no implementa medidas básicas de higiene, como el uso adecuado de guantes, batas o desinfección de material quirúrgico.
- Se utilizan medicamentos de forma inadecuada, favoreciendo la resistencia bacteriana.
- No se detectan ni controlan a tiempo infecciones en áreas críticas como quirófanos o unidades de cuidados intensivos (UCI).
Epidemiología y factores de riesgo que pueden haber contribuido a la producción de una infección nosocomial por negligencia médica
Frecuencia y distribución
Las infecciones más comunes son:
- Infecciones del tracto urinario (principalmente relacionadas con el uso de sondas vesicales).
- Infecciones quirúrgicas (en el sitio de la operación). En estos casos, resulta muy importante para ganar un juicio, demostrar que había signos infecciosos, como fiebre, líquido seropurulento alrededor de la herida quirúrgica, elevación de la Proteína C Reactiva y VSG en analítica, y por supuesto, cultivo posutivo para algún germen de dicho líquido que pueda haberse extraído durante una reintervención de desbridamiento y limpieza quirúrgica.
- Neumonías nosocomiales (frecuentes en pacientes con ventilación mecánica).
- Bacteriemias (asociadas a dispositivos intravasculares como catéteres). En estos casos, resulta muy importante para ganar un juicio, que exista cultivo positivo de la punta del catéter de algún germen, y que en cultivos del lugar de la intervención, y/o de hemocultivos, se detecte el mismo germen.
Factores contribuyentes
- Agente microbiano:
- Los microorganismos responsables suelen incluir bacterias resistentes como Staphylococcus aureus resistente a la meticilina (MRSA), Klebsiella o Pseudomonas aeruginosa. Por tanto, será fundamental para el juicio el cultivo donde se demuestre la existencia de alguno de estos gérmenes y que en el antibiograma se obseerve que es resistente a antibióticos variados, especialmente de uso hospitalario. Todo esto es un indicio claro de que el origen es hospitalario, porque los gérmenes que habitan en la comunidad y con los que convivimos normalmente, no suelen ser resistentes.
- También hay infecciones virales (virus de la hepatitis B y C, rotavirus) y fúngicas (Candida spp.).
- Paciente:
- Estado inmunológico comprometido por edad, enfermedades crónicas o procedimientos invasivos. Es habitual que los demandados se defiendan en juicio diciendo que todo es debido al mal estado previo del paciente, pero como insistimos en las declaraciones a los médicos, es evidente que dicho estado no ha causado u originado el germen. Por tanto, aún más cauteloso debió ser el Hospital.
- Ambiente hospitalario:
- Hacinamiento, personal sanitario infectado, equipos contaminados y deficiencias en las prácticas de limpieza y esterilización.
- Uso de antimicrobianos:
- La utilización indiscriminada de antibióticos favorece la aparición de resistencias bacterianas.
Prácticas que contribuyen a que no se produzcan infecciones, y cuya irregularidad, aumentará la incidencia y la existencia de una negligencia médica:
- Higiene de manos:
- Lavado con agua y jabón o uso de soluciones alcohólicas antes y después de atender a cada paciente.
- Uso de equipo de protección personal (EPP):
- Guantes, mascarillas y batas para reducir la transmisión cruzada.
- Manejo seguro de dispositivos invasivos:
- Asepsia rigurosa durante la inserción y mantenimiento de catéteres y sondas.
Control ambiental:
- Limpieza y desinfección de superficies y equipos.
- Control de calidad del agua y alimentos en el hospital.
Estrategias específicas:
- Profilaxis antimicrobiana: Uso limitado y apropiado de antibióticos para evitar resistencias.
- Educación continua: Capacitar al personal sanitario sobre prácticas de control de infecciones.
Dónde o cuándo se producen las infecciones hospitalarias más frecuentes
Incidiendo en los motivos anteriormente expuestos, podemos mencionar como causa de infección hospitalaria:
- Negligente utilización de viales, elementos que pueden conducir al contagio de múltiples afecciones.
- Persona allegadas al paciente que trasportan aéreamente o adheridos en zapatos (por ejemplo) bacilos susceptibles de afectar a las personas ingresadas.
- Partos. Se trata de una situación especialmente compleja, un proceso médico que debe conducirse con extremo cuidado en cuanto a la asepsia de salas y material.
- Negligencia por parte de personal médico, que no observe los aprendidos protocolos en cuanto a limpieza, protección (guantes, máscarilla, patucos…) y asepsia general en tratamientos hospitalarios.
- Contacto directo o indirecto con focos de patógenos residentes en instalaciones del centro médico, sean instalaciones como paramentos, revestimientos, complementos arquitectónicos…
- Tratamientos médicos no seguros.
- Deficiencia en cuanto al estado de las instalaciones médicas. La antigüedad es un factor negativo en cuanto a la esterilización, que resulta más difícil en estos casos.
Numerosos estudios han refrendado la peligrosidad de las infecciones hospitalarias. Por ejemplo, la Journal of Hepatology publicó estudios referentes a las infecciones de Hepatitis C. Tomando como referencia diversos hospitales de Cataluña, se llegó a la conclusión de que las dos terceras partes de centros médicos podrían habían sido vía de contagios de esta enfermedad en el año 2007.
Según los científicos especializados, las salas como quirófanos resultan especialmente relevantes en cuanto a su asepsia integral. Son particularmente problemáticas las salas dotadas de ventilación artificial o que integren cualquier conducto de conducción de ventilación o climatización.
Implicaciones jurídicas: demanda por infección intrahospitalaria
La responsabilidad legal en casos de infecciones hospitalarias se fundamenta en la obligación del hospital y del personal sanitario de garantizar un ambiente seguro para el paciente, de acuerdo con la normativa vigente y los estándares internacionales.
- Ley 41/2002 de Autonomía del Paciente: establece el derecho de los pacientes a recibir atención sanitaria de calidad y a ser informados de los riesgos inherentes a los tratamientos.
- Código Civil: regula la responsabilidad civil derivada de actos negligentes que causen daño a terceros (artículos 1902 y 1903).
- Normas de control de infecciones: incluyen protocolos nacionales basados en guías como las de la OMS, que especifican medidas de prevención y vigilancia epidemiológica.
Criterios para presentar una demanda:
- Daño al paciente: Deben demostrarse las consecuencias negativas para la salud, como complicaciones graves, secuelas o incapacidad.
- Relación causal: Debe quedar acreditado que el daño fue consecuencia directa de la infección adquirida por la negligencia del centro o del personal sanitario.
- Incumplimiento de protocolos: Se evalúa si el hospital adoptó las medidas necesarias para prevenir el contagio.
Ejemplos de casos legales:
- Infecciones postquirúrgicas por falta de esterilización de instrumental.
- Contagio de bacterias resistentes como el MARSA (Staphylococcus aureus resistente a la meticilina), klebsiella o pseudomona aureginosa, entre otras muchas.
- Brotes epidémicos en UCI por manejo inadecuado de dispositivos médicos.
La peculiaridad de las infecciones nosocomiales se refiere a dos cuestiones jurídicas muy importantes, derivada de la aplicación directa del artículo 148 de la Ley de Defensa de Consumidores y Usuarios y otras normas complementarias, según el cual "se responderá de los daños originados en el correcto uso de los servicios, cuando por su propia naturaleza, o por estar así reglamentariamente establecido, incluyan necesariamente la garantía de niveles determinados de eficacia o seguridad, en condiciones objetivas de determinación, y supongan controles técnicos, profesionales o sistemáticos de calidad, hasta llegar en debidas condiciones al consumidor y usuario.
En todo caso, se consideran sometidos a este régimen de responsabilidad los servicios sanitarios, los de reparación y mantenimiento de electrodomésticos, ascensores y vehículos de motor, servicios de rehabilitación y reparación de viviendas, servicios de revisión, instalación o similares de gas y electricidad y los relativos a medios de transporte". Las dos consecuencias conforme a la jurisprudencia del Tribunal Supremo son:
- La carga de la prueba se invierte, de tal forma y manera que el demandante no tiene que demostrar que la infección es hospitalaria, sino que es el demandado el que tendría que demostrar que es extrahospitalaria.
- La responsabilidad es objetiva, por lo que es indiferente que el demandante acredite que ha cumplido todas las medidas de prevención de infecciones.
Cómo denunciar una infección hospitalaria
Para poder llevar a cabo la denuncia por negligencia por una infección hospitalaria se deberán seguir los siguientes pasos:
- Recopilar pruebas:
- Solicitar el historial clínico completo, incluyendo los resultados de cultivos microbiológicos y exámenes complementarios.
- Recabar informes sobre el tratamiento recibido y la duración de la hospitalización.
- Documentar cualquier irregularidad observada durante la estancia, como instalaciones insalubres o prácticas negligentes.
- Ponerse en contacto con un abogado experto en negligencias médicas por infecciones
nosocomiales:
Estudiaremos la documentación que nos proporcione, le indicaremos qué documentos complementarios debe solicitar en el Hospital y lo analizaremos detenidamente junto a un perito médico, tras lo cual estaremos en condiciones de reunirnos en el despacho para darle una opinión sobre la viabilidad de una reclamación.
- Reclamación extrajudicial:
Una vez aceptado su caso, y decidido el cliente a reclamar bajo las condiciones económicas que le documentaremos desglosadamente y por escrito, realizaremos una reclamación extrajudicial que nunca es atendida por los Hospitales, ni por su aseguradoras.
- Procedimiento judicial:
Iniciaremos un procedimiento judicial bajo el camino procesal más favorable.
Indemnizaciones infecciones intrahospitalarias
Las indemnizaciones por infecciones hospitalarias buscan reparar los daños sufridos por el paciente, tanto físicos como psicológicos y económicos.
Factores que influyen en la cuantía:
- Gravedad del daño: Incluye la duración de la hospitalización, complicaciones derivadas y secuelas permanentes.
- Daños psicológicos: Como ansiedad o depresión causada por la experiencia de la infección.
- Gastos adicionales: Tratamientos posteriores, rehabilitación, pérdida de ingresos por incapacidad laboral.
Baremo de indemnizaciones en España:
El sistema legal utiliza un baremo para calcular las indemnizaciones por daños personales. Este baremo tiene en cuenta:
- Días de hospitalización.
- Incapacidades temporales o permanentes.
- Gastos médicos futuros.
Ejemplo de indemnización:
Un paciente que desarrolla una infección postquirúrgica debido a material quirúrgico no esterilizado puede recibir compensación por:
- Días de hospitalización adicionales: Incrementan los costos directos e indirectos.
- Tratamientos especializados: Como antibióticos de amplio espectro o cirugías adicionales.
- Secuelas permanentes: Que afecten la calidad de vida o la capacidad de trabajar.
En este tipo de casos, contar con asesoramiento jurídico especializado es fundamental para maximizar la posibilidad de obtener una compensación justa.
Si sospecha que ha podido sufrir una negligencia médica y contraer una infección hospitalaria, y recoge toda la documentación necesaria para poder demostrar la negligencia, el primer paso para poder proceder, es ponerse en contacto con nuestro despacho de abogados especializados en negligencias médicas.
Contacte ahora con el despacho de Ramos Mesonero para poder estudiar el caso y empezar con el proceso de denuncia para su caso concreto.