Denunciar una mala praxis quirurgica

IInterponer una denuncia por mala praxis quirúrgica es un derecho legal de los pacientes que han sufrido daños innecesarios debido a errores médicos.

Para que una demanda sea viable, es fundamental demostrar que la cirugía no se realizó conforme a la lex artis, es decir, que el profesional sanitario se apartó de los protocolos y estándares médicos aplicables.

Algunas señales de alerta que pueden indicar una posible mala praxis son:

• Complicaciones graves no explicadas por el cirujano. El documento específico que hay que revisar, es la hoja o informe quirúrgico, donde debe constar el cirujano principal y ayudante intervinientes, así como el personal de enfermería (circulante e instrumentista). Igualmente debe figurar la hora de inicio y finalización junto con una descripción de lo realizado. El problema es que en España, a - a diferencia de otros países como Estados Unidos, - hacen una explicación tan pobre y escasa que es difícil demostrar si ha habido mala praxis, quedando siempre considerado como riesgo o complicación.
• Infecciones postquirúrgicas severas debido a falta de asepsia. Éste es el supuesto normalmente con más probabilidad de éxito si puede considerarse una infección nosocomial o intrahospitalaria (actualmente se utiliza el término IRAS, infección relacionada con la asistencia sanitaria).
• Dolor extremo o secuelas inesperadas tras la cirugía, siempre y cuando lo podamos vincular con un acto contrario a protocolo o guía clínica, y no como un riesgo o complicación.
• Necesidad de una segunda intervención para corregir errores previos.
• Falta de información del riesgo producido en el consentimiento informado.

Qué se considera mala praxis quirurgica

Para que un error quirúrgico se considere negligencia médica, deben concurrir estos elementos:

• Error del cirujano o del equipo médico: Por ejemplo, lesiones innecesarias en órganos, arterias o nervios, olvido de material quirúrgico dentro del paciente o uso incorrecto de instrumental.
• Infracción de la lex artis ad hoc: No se han seguido los estándares médicos adecuados para la intervención en cuestión.
• Daño evitable: El paciente sufre un perjuicio físico o psicológico que no habría ocurrido si la cirugía se hubiera realizado correctamente.
• Relación de causalidad: Se debe demostrar que el daño es consecuencia directa de la mala praxis y no de una complicación inevitable del procedimiento.

No todas las complicaciones postoperatorias son atribuibles a una negligencia; la mayoría se consideran riesgos o complicaciones de la intervención, en que el demandante es incapaz de demostrar en qué aspecto concreto se ha producido la mala praxis.

Tipos de mala praxis quirugica más comunes

Las negligencias médicas en cirugía pueden clasificarse en diferentes tipos:

1. Errores durante la cirugía

• Lesión de órganos o estructuras adyacentes: Por un mal uso del bisturí o de instrumentos quirúrgicos.
• Pérdida excesiva de sangre por errores en la hemostasia.
• Daños neurológicos por errores en la anestesia.

2. Errores postoperatorios

• Infecciones graves por falta de asepsia o mala administración de antibióticos.
• Trombosis o embolias por falta de profilaxis antitrombolítica del paciente. Junto a la infección nosocomial, éste puede ser el segundo supuesto más viable, cuando en el postoperatorio no se prescribe heparina, - estando indicado, - y se produce un TEP (tromboembolismo pulmonar) que puede causar graves secuelas o incluso el fallecimiento.
• Retrasos en el diagnóstico de complicaciones quirúrgicas

3. Cirugías innecesarias o mal indicadas

• Errores en el diagnóstico que llevan a una intervención quirúrgica innecesaria.
• Implantación de prótesis defectuosas o materiales quirúrgicos inadecuados.

4. Falta de consentimiento informado

• El paciente no fue informado de los riesgos reales del procedimiento antes de la cirugía.

Si has sufrido alguna de estas situaciones, es posible que tengas derecho a reclamar una indemnización por negligencia quirúrgica.

Cómo detectar si ha sido víctima de una mala praxis quirurgica

Existen signos y síntomas que pueden indicar que una cirugía ha sido realizada con mala praxis:

• Complicaciones inesperadas no explicadas por los médicos.
• Infecciones graves tras la cirugía sin una causa clara.
• Secuelas permanentes que podrían haberse evitado con una correcta técnica quirúrgica.
• Síntomas neurológicos como parálisis o alteraciones sensitivas tras la intervención.
• Necesidad de una segunda cirugía para reparar errores cometidos en la primera.

Si has experimentado alguno de estos problemas, es importante solicitar tu historial clínico y consultar a un abogado especializado en negligencias médicas.

Cuándo puede denunciar una mala praxis quirurgica

Puedes interponer una demanda cuando se cumplan estas condiciones:

• Error evidente en la cirugía que haya causado un daño evitable.
• Secuelas permanentes o incapacitantes derivadas del procedimiento.
• Falta de consentimiento informado antes de la operación.
• Fallecimiento del paciente por complicaciones quirúrgicas evitables.

Recuerda que no todas las complicaciones postoperatorias constituyen una negligencia. Es necesario demostrar que el daño fue resultado de una actuación médica incorrecta.

Si crees que has sido víctima de mala praxis quirúrgica, sigue estos pasos:

1. Obtén tu historial clínico

Solicita una copia completa de tu expediente médico o de tu familiar (en caso de fallecimiento o menores de edad), incluyendo hojas de informes quirúrgico, hojas de evolución de medicina o curso clínico y de enfermería, pruebas radiológicas, analíticas y cultivos con sus antibiogramas, así como informe de alta (aunque sea fallecimiento).

2. Realización de un informe pericial médico

Un médico perito especializado en negligencias analizará si la cirugía se apartó de los protocolos adecuados. Este despacho se encarga de esta tarea tan importante.

3. Presentación de una reclamación extrajudicial

Si la cirugía se realizó en un hospital público, se debe presentar una reclamación ante la administración sanitaria.

4. Interposición de una demanda judicial

Si no hay acuerdo, se acabará en un Juzgado.

5. Determinación de la indemnización

El juez evaluará los daños sufridos y determinará la cantidad a indemnizar en función del baremo de daños personales, teniendo en cuenta la necesaria petición del demandante.

Plazos para denunciar una mala praxis quirurgica

Si nos encontramos ante sanidad pública, el plazo de prescripción para reclamar será de un año.

Si se trata de sanidad privada, será de cinco años.

Si se trata de sanidad privada cubierta por una Entidad Aseguradora Sanitaria:

• Contra dicha Entidad, cinco años (se puede reclamar contra ella si el seguro es de cuadro médico, y no de reembolso).
• Contra el sujeto responsable de los hechos, un año.

Si se trata de sanidad privada de una Entidad Aseguradora Sanitaria por pertenencia a MUFACE o ISFAS, el plazo será de un año en todo caso.

Es recomendable actuar cuanto antes para garantizar la disponibilidad de pruebas y facilitar el éxito de la reclamación.

La mala praxis quirúrgica es una negligencia médica por la que puede, y debe, reclamar una indemnización médica.

Si ha sido víctima, o sospecha que algún familiar ha podido ser víctima de una mala praxis quirúrgica, no pierda ni un segundo más para contactar con nuestro despacho de abogados especialistas en negligencias médicas.